lunes, 25 de junio de 2012

La capacidad de lucha y sacrificio

Creo que es una de las fortalezas más importantes de los seres humanos. La lucha y el espíritu de sacrificio son dos pilares fundamentales en nuestras vidas, en todos los ámbitos, con la familia, con los/as amigos/as, con los/as compañeros/as del trabajo, es inherente a la persona y no podemos dejarlas escapar.

Cuando has sufrido un grave problema en la familia, sea por enfermedad ó por un accidente, y has estado durante un tiempo sufriendo en soledad, cuando has querido mantenerte en esa tesitura, en un carácter, y en una consolidación de tu personalidad que hace que superes con creces según qué situaciones. No creo que todos/as estemos preparados para ello, de hecho existen muchas personas que tras una mala época, no lo han llevado de la mejor forma posible, y lo han soportado durante toda su vida.

En cambio hay personas que han logrado un bienestar y una libertad fruto de una lucha y una fuerza interior generada con el tiempo. No es fácil, y creo que en la compañia de gente importante para tí, y en la escucha de sus consejos se encuentra la clave del éxito.

En otros ámbitos, sean los negocios, las relaciones de amistad ó relaciones más superficiales, la lucha por hacer tu trabajo lo mejor posible, y que ello sea recompensado es un premio que día a día te ayuda a enfrentarte a retos más difíciles.

Aunque hayas tenido baches en tu vida que hayan dificultado la buena marcha de ella, creo que hemos sabido enfrentarnos con valentia, y que podemos con esto y con más.

Finalizamos un mes lleno de noticias, pero sobre todo, lleno de lucha y sacrificio por querer cambiar un mundo en constante movimiento, y nosotros/as no nos quedaremos parados, sino que intentaremos trabajar todos los días para hacernos un hueco en la vida, y hacer saber nuestra valía y fuerza.

Con trabajo, seriedad y honestidad se viaja al Fin del Mundo. Luchemos por lo que queremos. Costará pero lo conseguiremos.

Con mis reflexiones sobre el trabajo os emplazo a mañana Martes 26.

Feliz Tarde de Lunes.

¡Ah, se me olvida dar la enhorabuena a Olaizola II por su victoria!

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