Muy buenas tardes a todos/as. Con este titular nos hemos despertado hoy tras la celebración del Bicentenario del Poder Judicial. Carlos Divar dimitia minutos antes de celebrarse el pleno extraordinario tras el caso de los viajes del magistrado a Marbella con dinero público.
Es un caso espinoso y como tal, lo debemos tratar con el mayor cuidado posible. Creo que están apareciendo numerosos casos de corrupción y "aprovechamiento libre del dinero público" de un modo ostentoso, frio, y sobre todo, ilegal.
No es ni demagogia ni populismo sino la cruda realidad. La mayoria de los ciudadanos españoles nos labramos un futuro con formación personal y profesional que posibilita el mejor acceso posible al mercado laboral. Estudiamos muchos años para intentar obtener un puesto de trabajo acorde a nuestro perfil y posibilidades. Hoy en día no tenemos la opción de elegir, sólo nos queda aceptar lo que "nos echen", vulgarmente hablando.
Carlos Divar tiene una trayectoria profesional intachable donde todo el cuerpo judicial lo tenía como un referente, y como un ejemplo a seguir. Durante los ocho años de su cargo en el Consejo General del Poder Judicial, realizó 32 viajes a Marbella, presuntamente de carácter personal, omitiéndolo a los órganos competentes.
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| Los viajes de Carlos Divar |
Carlos Divar ha afirmado a los medios de comunicación la creación de una campaña de desprestigio para eliminarle del Poder Judicial creada por sus enemigos. Según él, claro está.
"Dimite sin conciencia de culpa y sintiéndose víctima de una campaña" como he mencionado anteriormente.
Creo en la inocencia de las personas hasta que se demuestre su culpabilidad, pero están surgiendo muchos casos que me hacen dudar de la política española. Espero que no sea demasiado tarde.
Con esta reflexión política tras la dimisión de Carlos Divar, ex-presidente del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Supremo me despido hasta mañana.
Feliz tarde de Viernes.
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