jueves, 21 de noviembre de 2013

¡Y es que tenemos que agradecer tener trabajo!



Muy buenas noches a todos/as.

Lo llevo hablando desde hace mucho tiempo.

Pero debemos agradecer el trabajo que tenemos para no engrosar la triste lista de parados y ser uno mas en la trágica pero real cola del INEM. Todos los días filas infinitas, mas si cabe en las ciudades grandes, recorren las calles con caras que reflejan la actualidad en un país con mas de seis millones de parados.

Hablando con personas de mi entorno, era consciente de que las personas que trabajamos en la actualidad, somos unos auténticos privilegiados, y que no tenemos derecho a quejarnos para nada. No podemos decir ni mu, porque tampoco lo merecen las personas que se encuentran desempleadas.

Un país necesita a sus trabajadores, y no quiere ver en las noticias, día sí y día tambien EREs en las empresas de tu provincia, ni concursos de acreedores o suspensiones de pagos en crecimiento exponencial.

Hoy en el trabajo, un proveedor me decía que la empresa Fagor podía llevarse consigo a la entidad bancaria Banco Popular, por la cantidad de dinero que albergaba esta sede en sus arcas. Y que la empresa de al lado había cerrado hace unos dias dejando a mas de 40 familias en la calle. Porque no son personas sino familias con todos sus integrantes en desempleo.

Tenemos que trabajar los que nos encontramos empleados para que entre todos los que podamos, intentemos y logremos una mejora de la coyuntura económica y social que lleva arrastrándonos desde Agosto de 2007. Mas de 6 años de letargo, y de una disminución clara del consumo, que junto al aumento de parados, alerta de un fin trágico para España como no hagámos algo. Y de inmediato.

Porque esta en nuestras manos.

Ya ni nos podemos creer al Presidente del Gobierno cuando sorprende en sus declaraciones positivas sobre el futuro de España. Gracias a las inversiones, dice que saldremos de la crisis en el segundo semestre del año. Un aumento porcentual que será acusado durante el año 2015. Eso es lo que dice. Pero yo, ya no me lo creo.

Ni a él, ni a ningún político. He dejado de creer en una de mis pasiones, la política.

No nos podemos dejar engañar por palabras decoradas con lazos, que al fin y al cabo, son solo palabras, y ello no mejora la imágen de un pais. No se hacen respetar porque sus discursos han dejado de tener importancia, y han dejado de tener credibilidad.

No es suficiente con seis millones de parados. Porque vamos subiendo, y la cosa no pinta nada bien. Existen familias en la actualidad con todos sus integrantes en desempleo, lo que a falta de ayudas y subsidios, estos se encuentran abocados a la desesperación que provoca además grandes conflictos sociales, fruto de una mala gestión política. Y además nos quieren recortar mas.

Pues Señor Rajoy, aqui pongo mi cabeza para que me la corte, junto al resto de españoles.

No mienta mas, porque su plumero es de sobra conocido.

Pensad sobre lo escrito.

Feliz Jueves, y ya mañana, Viernes de fiesta, relax y tranquilidad.

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