Manuel Mota era encontrado el pasado 8 de Enero en el servicio del Centro de Salud de Sitges, lugar donde residía, por personal del ambulatorio. Dejaba tres cartas, a su pareja, a su familia y a la policia. Raro.
Vivía en una continua amargura en la empresa Pronovias, propiedad de Alberto Palatchi. La presión, la tensión y las malas palabras era la tónica general de un día a día sin remedio que Manuel Mota tenía que superar por el amor a la moda.
Diseñador de famosas, genio de la moda, y un mago del hilo y la aguja. Todos/as los/as que le conocían destacaban su bondad y su maestría y profesionalidad. Por lo que nos preguntamos, ¿por qué?
Una ceremonia muy sencilla despidió a Manuel en compañía de su familia y amigos íntimos. Por expreso deseo de la familia, la empresa Pronovias, a la que Manuel estuvo vinculado durante 26 años, él tenía sólo 46, no acudió, por según allegados, pésima relación laboral, como parece ser que escribió en la carta dirigida a los Mossos de Esquadra.
Pronovias se ha adelantado a desvincularse en ser una de las causas de la muerte de Manuel Mota. Pero todavía queda mucho por contar y por saber. Manuel no estaba bien en la empresa, pero un contrato lo mantenía sujeto sin opción de salir de ese pozo sin fondo que comenzó ya hace unos años.
La tristeza que invadía la vida de Manuel Mota era la tónica general durante los últimos meses, según cuenta su amiga, la actriz, Ana Milán, en su cuenta de Twitter, que ahora lamenta la cruel muerte del diseñador.
Otro de los interrogantes que se plantean es la forma en la que murió. A falta de los resultados de la autopsía que esclarecerán las causas del fallecimiento, Manuel Mota, se suicidió clavándose un puñal en el corazón, modo de confesar su dolor en vida. No podemos hablar antes de tiempo, pero fue una forma de sufrir, y creo que no se merecía tanto dolor en vida, como para acabar de esa manera.
D.E.P. Manuel Mota
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