Muy buenas tardes a todos/as.
Como es costumbre ya en el blog, esta semana escribiré a cada uno de los miembros de la Familia Real española que to estime oportuno, una carta, con consejos, sugerencias, y lo que ellos despiertan en mí.
Comienzo con la hija mayor de los Reyes de España:
Señora Infanta Elena,
me dirijo a Usted con el debido respeto.
Con el debido respeto que a usted no le tuvieron nunca.
Le relegaron de un puesto que por orden dinástico se merecia,
pero nunca perdió la compostura.
Le han tratado de no ser muy larga en sus pensamientos,
incluso de habérsele olvidado algún verano en su vida,
pero jamás ha perdido ese don de los Bornones.
Ha sido, es, y será la representante mas borbona de la familia,
la mas protocolaria, original y transguesora.
Visceral y de fuerte carácter,
pero bonachona y noble.
Tontona, con los debidos respetos.
No muy hábil con los estudios,
la política para el hermano,
y los cálculos financieros para la hermana, summa cum laude en robar.
Usted fue madre, dos hijos, dos perfiles diferentes.
Froilan el Divertido, y Victoria la tímida.
Casada con Jaime de Marichalar,
divorciada mas tarde,
supo salir adelante sola y con hijos,
sin recursos mentales, pero sí económicos.
En el reparto, Dios se quedó corto.
Con el debido respeto Señora.
No tiene potestad para reinar un país,
pero lo habría hecho bien.
Saludar y sonreir al mismo tiempo no debe ser difícil.
Usted lo hace, bravo Señora.
Su madre ha sido una gran profesora,
su padre no lo ha sido tanto.
Tontona, con el debido respeto,
trabajadora para la foto en las revistas,
para el resto, dejamos los saltos en caballo.
Que de salto en salto,
termino por decirle, con el debido respeto,
que Usted no me cae mal, incluso bien.
¡Claro! la competencia que tiene le dejará siempre en buen lugar.
Se despide de Usted,
con un beso muy fuerte,
y esperanzas de cambio a futuro.
Feliz Lunes.
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