lunes, 13 de enero de 2014

Cinco normas para seguir siendo tú mismo



Muy buenas tardes a todos y feliz Lunes.

Muchas personas renuncian a su libertad porque tienen miedo al qué dirán, a fracasar, a quedarse solas, a tener que enfrentarse con los demás. Toman, en definitiva, el camino más trillado y, al final, se arrepienten de ello, ya que pierden la oportunidad de ser felices. Para evitarlo, toma tus propias decisiones, afronta la realidad, asume los riesgos y no te arredres ante las dificultades.

Tenemos que ser nosotros mismos, como ya lo vengo adelantando en los últimos posts, porque la experiencia me hace cada vez sabedor de perfiles manipuladores y manipulados. Pero yo sigo mi camino, como todos/as debemos seguirlo.

En primer lugar, debes seguir tu trayectoria de vida, debes superar la inercia, no hagas lo que hacen los demás. Si tienes claro lo que quieres, irás directo hacia ello, sin importarte lo que hacen las personas de tu entorno.

También debes ser fiel a tus principios, y jamás permitas que nada ni nadie te haga cambiar de idea y tomar decisiones contrarias a aquellas normas que siempre han gobernado tu vida.

Ante todo, conviértete en tu propio modelo. Seguro que hay una seria de personas a las que admiras. Eso está muy bien, pero no intentes convertirte en quien no eres. El primer deber del hombre y de la mujer es ser uno mismo. Siempre.

Por lo que, siendo consciente de la realidad, debes aprender a decir "NO", y evitar, por todos los medios, la manipulación por parte de los demás. haz lo que tienes que hacer y, si no estás de acuerdo con lo que te piden los demás, niégate a ello.

Y por último, creo que también debemos actuar de forma responsable. Ser libre no significa hacer lo que nos apetece en cada momento. Cuando tomes una decisión, debe estar fundamentada en tus conocimientos y en tu sentido de la responsabilidad.

Por ello mismo, el post de hoy, de comienzo de semana, es una antesala a lo que cada persona debe ser en la vida, y cómo debe actuar para perseguir sus propias metas tanto personales como profesionales.

La experiencia me ha aportado la fuerza y la suficiente valía como para hablar alto y claro, y decir en mayúsculas lo que opino de unas situaciones con el deber y rigor, y ante todo con el respeto que se merecen.

Jamás conviertas tu vida, en la vida de los demás. Sino vive la tuya propia.

Feliz Lunes.


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