Muy buenos días a todos/as.
Al igual que hacía el pasado Martes 16 de Abril con la sentencia de la cantante Isabel Pantoja por un caso de blanqueo de capitales, lo hago de la misma forma con la sentencia del torero José Ortega Cano por homicidio imprudente el pasado 28 de Mayo de 2011.
La sentencia es leve, pero si no recurren sus abogados ante el Tribunal Supremo, el torero ha sido condenado hace escasos treinta minutos a 2 años y medio de cárcel, por el accidente que costó la vida de Carlos Parra.
El Juzgado de lo Penal número 6 de Sevilla citó este miércoles a las partes personadas en este procedimiento para notificarles la sentencia, que se conoce un mes después de que finalizara un juicio que se prolongó durante cinco sesiones, celebradas entre los pasados días 12 y 19 de marzo.
Según avanzó ayer su abogado, el diestro no ha acudido personalmente a recoger el fallo, pero deberá hacerlo en un plazo de cinco días. Su defensor, Enrique Trebolle, ha acudido a recoger la sentencia, así como los abogados de la familia de Carlos Parra, el hombre de 38 años que murió en el accidente.
Según avanzó ayer su abogado, el diestro no ha acudido personalmente a recoger el fallo, pero deberá hacerlo en un plazo de cinco días. Su defensor, Enrique Trebolle, ha acudido a recoger la sentencia, así como los abogados de la familia de Carlos Parra, el hombre de 38 años que murió en el accidente.
El diestro dijo que la muerte de Carlos Parra ha sido "el percance más grave de su vida", y añadió que por ser un personaje público ha sufrido "una injusticia enorme". “Estoy pasando un quinario, llevo casi dos años pasándolo muy mal”, declaró, "uniéndose al dolor” de la familia del fallecido. “Yo me quería morir”, afirmó cuando se enteró de que había muerto una persona. "Que sea lo que Dios quiera y la Justicia dictamine", afirmó en pie ante la juez Sagrario Romero. (Fuente: ABC)
La viuda del fallecido se encuentra trabajando fuera de España y tampoco ha acudido a recoger la sentencia. Enrique Trebolle ha confesado a su llegada que el torero esperaba la sentencia con "fe en Dios y en la justicia".
Menos fe y mas honestidad y seriedad.
Y ahora me dirijo a Usted, Señor Ortega Cano, cara a cara le pregunto:
¿Cómo se siente tras esta sentencia?
¿Podrá dormir tranquilo algún día?
¿No se siente avergonzado con su actitud durante el juicio?
¿No siente la obligación moral de pedir perdón a la familia?
Pienso que nunca leerá estas palabras,
pero espero y deseo que la Justicia siga siendo justa.
Que las personas que cometen errores con consecuencias mortales,
sepan reconocer su fallo, y comenzar una vida real.
Creo que no es consciente de la gravedad de sus hechos,
pero ante todo sea consciente de su vida,
y de su futuro a partir del día de hoy.
Un punto de inflexión que cambiará para siempre,
la versión que durante meses ha querido dar.
Usted bebió, y mató, de forma imprudente a una persona.
La Justicia ha puesto punto y final a su mentira.
Y a vosotros os deseo días de libertad por siempre.
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