domingo, 24 de mayo de 2015

Alegría y optimismo




Muy buenas tardes a todos/as.

Con mi voto en las urnas, y aplaudiendo la actuación de Edurne en Eurovisión me dispongo a hablaros sobre uno de los ingredientes básicos en la vida que están faltando en nuestra sociedad en los últimos tiempos.

Si titulo el post de hoy con dos bonitas palabras, como son la alegría y el optimismo, es porque existe una razón detrás de ella. Existe una razón que de una forma elegante la voy a comentar en el articulo de hoy, Domingo electoral.

Como todos/as sabéis, mi blog es muy personal, es mi vida, y en muchas ocasiones no puedo evitar pasar una frontera que no querría haber pasado. Pero así soy, y de esta forma me abro a vosotros/as. Mi intención es escribir mas a menudo, y que no me pueda el cansancio, sino que mis energías se canalicen de una forma que me permita llevar a cabo todas las tareas que me proponga en el día a día.

Soy una persona alegre y vital. Optimista, aunque también realista.

Soy joven, y por suerte con trabajo. Muchos de nosotros lo tenemos. Disponemos de trabajo, ya algunos de ellos, tienen una casa, sea por alquiler o en propiedad. Les acompañan parejas, ya sean casados, viviendo juntos o novios/as con proyectos futuros en común. Amigos/as que les animan, les aconsejan y les miman. Familias que les protegen y ayudan. 

Quiero decir con ello, que no nos podemos quejar ni llevar un halo de tristeza, nostalgia y pesadumbre encima de los hombros. No podemos dejar que nos gane la pereza y el pesimismo. Se que todos somos diferentes. Que no nos parecemos. Que somos de un padre y de una madre. Pero hay cambios que no se entienden. La gente cambia. Eso está claro. Y no podemos hacer que las personas sean a nuestra imagen y semejanza.

¿Cómo hacemos para que las personas cambien?, ¿cómo llamamos la atención de aquellas amistades y familiares que mueren en la pesadumbre y la sinrazón?, ¿las que se dejan llevar por la vida sin ton ni son, y la alegría ha desaparecido?

Muchas veces no sabemos como actuar, porque en definitiva, no queremos "molestar" ni hacer que se sientan mal, cuando seguramente esas personas no se sienten mal consigo mismas. O quizá si. Difícil cuestión.

Pero yo ya he desistido. Desisto de ser "pelma". Porque en ocasiones las personas no lo agradecen. Y tampoco lo haces por que te lo agradezcan, pero somos personas y no robots. Y ni siquiera ayudas, para que te ayuden, ni mucho menos, pero somos personas y no robots. Escuchas comentarios que te hacen pensar, pero por contra, piensas en personas que has ganado, y que nunca habrías imaginado. Personas que desde hace muchos años han estado contigo, pero que de una forma exponencial, su amistad para contigo ha aumentado para bien personal.

Cuando te das cuenta que hay personas que piensan que siempre tienes que estar detrás de ellas, al final, los tontos de turno nos cansamos. Porque en definitiva, todos tenemos nuestras vidas con nuestros sinsabores, y no hay mas.

Feliz semana de Mayo, última ya.

No hay comentarios:

Publicar un comentario