Muy buenas noches a todos/as.
Todos los días no son iguales, y hoy no ha sido fácil.
Hay días y días, pero la actual situación te hace revivir la vida de muchas personas que no tienen trabajo, y que luchan por un futuro mejor. Que desean trabajar, que quieren demostrar lo que son. Porque a veces, hay que luchar hasta el final. Hasta que no quede gota de sudor, hasta que hayas logrado conseguir tu propio sueño.
Lamentando las situaciones, las difíciles situaciones de millones de personas, siendo consciente de que el trabajo da vida, es el mejor ingrediente para continuar, y porque según decía mi tio, ya fallecido, debemos pensar mucho y prestar la mayor de las energías en lo que queremos, en lo que soñamos, en lo que ansiamos, a lo que aspiramos.
Porque la falta de trabajo es una gran falta. No quiero particularizarlo todo en este ámbito, pero no debemos cambiar cuando todo va bien. Cuando la lucha, el esfuerzo y el trabajo quieren continuar, sin sobresaltos ni imprevistos. Desean continuar y punto.
Debemos valorar al prójimo por lo enseñado, y no suena a despedida. No es un punto y final, sino un punto y seguido. Porque cuando luchas y pones toda la carne en el asador, sólo quieres continuar, y continuar por lo que has hecho.
El camino ha podido ser difícil, con momentos buenos, la mayoria de ellos, y otros no tanto. Pero no somos simples seres humanos, sino personas que queremos conseguir nuestro sueño. Cada uno de nosotros tenemos un sueño, y debemos levantarnos todos los días para conseguirlo.
Consciente de la actual coyuntura económica del país, y de los muchos esfuerzos que deben hacer las empresas para continuar en pie, os hablo cara a cara, con una actitud valiente, seria y honesta, en la que siempre debemos valorarnos, y hacer que objetivos comunes, sean particulares.
No podemos dejar escapar oportunidades. Debemos aprovecharlas.
Porque aun quedando poco tiempo, ese tiempo puede ser mayor, porque nunca he sentido las ganas de poder continuar con un proyecto, y porque aun siendo jóven, he visto mucho. He aprendido, tanto personal como profesionalmente, y ello me hace respirar profundo para continuar. Para continuar de frente.
Porque pasados varios muros, varios frentes, y diversos pasadizos, llegamos al momento decisivo, en el que se decide a una moneda, a un todo o nada, tu futuro. Porque tras mucho tiempo, el tribunal decide tu continuidad, y porque debes mantenerte fuerte y humilde ante cualquier decisión. Pero las decisiones, todas ellas, esconden de forma intrínseca, lecciones para crecer y madurar en la vida.
Momentos difíciles, que se tienen que vivir, y que viviremos. Como los viven muchos españoles. Pero cuando uno es el protagonista, la realidad se ve de diferente forma. Las rutinas se convierten en indecisiones e incertidumbre. Las ganas de luchar y la ilusión por lo que haces, sólo es la antesala de lo que precede a un dictámen.
Pero seámos pacientes, y seámos ante todo, PERSONAS.
Feliz Miércoles de lluvia.
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