Muy buenas noches. El tema que inspira al post de hoy es de todo menos cómico, divertido ó ejemplar. Después de unas fiestas sin igual, y que las recomiendo a todo el mundo, porque saben adaptarse a todos y cada uno de los perfiles, y los perfiles a ellas, he de comentar un grave problema existente en la sociedad que conocemos todos y todas, y que por ser legalizado su consumo, el mal es menor, o por lo menos esta encubierto en una hipocresía artificial.
El problema del alcoholismo es duro, no, durísimo. Destroza familias, parejas, amistades. No toleraré jamás a nadie, y ya sabeís que escucho y me considero una persona demócrata, y respetuosa, que justifique el alcohol como válvula de escape.
Existen muchas personas, más de las que nos pensamos en la sociedad con graves problemas con el alcohol, que de manera encubierta muestran una personalidad muy lejana a la realidad. Creo que es duro caer en el mundo del alcohol, y digo creo porque personalmente no tengo ese problema afortunadamente, pero para cada persona hay un caso, una vida, una historia, y tampoco soy nadie para juzgar ni para criticar actitudes cuando tampoco nos gustan que las personas se inmiscuyan en nuestras vidas.
Otra cosa muy distinta es la labor de ayuda, en este caso sí que tenemos que darle la importancia que tiene, y tanto si la persona está o no por la labor de ser ayudada, el paso de dejarlo, es el gran paso que hay que dar, y muchas veces no es posible, teniendo consecuencias nefastas.
Las causas múltiples y variadas, y no voy a enumerarlas porque no me daría espacio en el blog para ejemplificarlo, pero el entorno puede potenciarlo, ó reducirlo. No creo que existan personas buenas o malas en este ámbito, sino actitudes y causas que no conoceremos jamás.
Me da pena escuchar a las personas que intentar justificar estos comportamientos, porque hacen más daño del que se imaginan.
Bueno, y las drogas ni digamos. Eso es caso aparte.
Y quiero dejar claro, que beber unas copas un fin de semana con los/as amigos/as, no es comparable, y que todos/as nos hemos cogido el punto y hemos disfrutado, pero lo otro es caso aparte.
Espero haber servido de canal para todos los problemas existentes causados por el alcohol.
Otras vidas, otras historias, pero hay que entender, comprender, ayudar.
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