Muy buenas noches a todos/as.
Y feliz noche de Viernes.
En una semana bastante agobiante y crítica en el terreno personal, pero con resultados exitosos me enfrento a hablar del machismo, del feminismo, y de tantas tonterías en boca de la Presidenta del Circulo de Empresarios, Mónica de Oriol.
Ha tenido su minuto de gloria, pero yo lo voy a extender a dos o tres mas, con el simple objetivo de que escuche las palabras de un asalariado mas, hombre, jóven, con todo el futuro por delante, pero defensor a ultranza de la igualdad de oportunidades tanto para un hombre como para una mujer.
No me cabe duda que mis palabras por un oido le entran y por otro le salen. Es triste, pero comenzaré a mirarle a la cara y hablar con contundencia sobre problemas que caen desde el machismo de boca de mujer. Si no querias taza, tienes taza y media.
Puedo comprender palabras de personas mayores que no han vivido en su juventud tiempos como el de ahora, en el que la mujer trabajaba como la que mas en casa, mientras el marido trabajaba fuera de ella. Los dos desempeñaban tareas en aras a un objetivo común. Trabajo ante todo. Pero lo que no puedo entender son las palabras de una persona que creía ser inteligente afirmando que no contratará a una mujer si tiene 25 años o mas, o en cambio si lo hará a la que supera los 45. Embarazadas o en edad fertil ni oir hablar, claro está.
Una mujer que cuando habla sube el pan. Porque hace unos años afirmó que las personas que no tenian ni estudios ni experiencia profesional debería cobrar menos que el salario minimo interprofesional por el sentido de que "demasiado les damos para lo que aportan a la sociedad" según sus sucias palabras.
Me parece una mujer anormal, y respetadme que hable así. Pero desde el sillón de presidencia del Circulo de Empresarios es muy sencillo hablar. Es muy sencillo hablar cuando sus trompas de Falopio gritan salir de un cuerpo en el que no se sienten identificadas, y que son desechadas verbalmente por su dueña.
Una mujer que no conoce la problemática real de los españoles. Porque si nos encontramos en una situación favorecida, ya el tener trabajo te la otorga, no tenemos la obligación social sino el deber moral de ayudar, y de tender la mano a aquellas personas que lo necesitan realmente.
A las personas que, como mínimo, se merecen el salario mínimo por desempeñar una labor, no se les debe menospreciar de esta manera. No deben considerarse a las personas sin sentimientos, sino como humanos con un valor añadido real, que saben aportar a la sociedad lo que saben. Sus conocimientos.
Porque, Mónica de Oriol solo se describe como una mujer sin sentimientos, sin conocimiento de causa, con una idea clara, los números de sus empresas. Nada mas. Pero los numeros los crean las personas, embarazadas, en edad fértil o no. Todas.
Porque hoy en día la contratación es muy difícil. Ni digamos la indefinida. Eventuales haylos. Pero desde este espacio quiero felicitar a una amiga por dar un paso mas en su carrera profesional, y formar parte de una manera real, directa y segura en la compañía en la que trabaja. Enhorabuena porque lo mereces de verdad. Al final el trabajo se recompensa.
Feliz noche de Viernes y feliz fin de semana de Octubre.
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