Muy buenas tardes a todos/as.
En un caluroso Lunes de Agosto.
Hoy voy a escribir sobre esos posts que tanto os interesan y por los que siempre recibo mensajes de agradecimiento. No lo hago por ello, sino por ayudar y porque es un orgullo saber que lo que lees ayuda al resto.
No creo en supersticiones, ni malos farios, ni mucho menos en la mala suerte. Creo que recorremos la vida y con ella admitimos ser testigos de casos y hechos que nos hacen madurar y crecer como personas en sociedad.
En mi vida personal he de admitir, que he llegado a cometer errores, que siempre han hecho que mis ganas de continuar y de luchar por la vida sean mayores que las que te intentan dejar en el sofa de la vida. Viendo como tu propia existencia pasa lentamente.
Soy positivo, soy optimista, y entiendo la vida como tal. Dentro de la propia valoración que haga de cada momento, caso que queda para mi ámbito mas privado, he de decir que la vida me ha regalado mas que robado, que la vida me ha premiado mas que rechazado, y que la vida me ha sonreido mas que entristecido.
Malas temporadas pueden haber existido, pero siempre han sido valedoras de un final feliz, y de un consejo a tener en cuenta en la vida: jamás dejes de lado a quién te ayuda. Debemos ser generosos. Siempre. No tenemos que utilizarnos, no somos números sino somos personas, y tampoco somos robots sino seres humanos con sentimientos, pensamientos, ideas, filias y fobias.
Si no puedes olvidar en la vida, intenta relativizar, intenta que tu vida la escribas siempre tú. Sin vaivenes, sin influencias que hagan que tú mismo te arrepientas de tu propio recorrido. La amistad en muchas ocasiones puede resultar subjetiva, poco clara, y menos aún, precisa. Pero cuando realmente encuentras, en un momento determinado la horma de tu zapato, cuando encuentras a una persona que se interesa por tí, que tú te interesas por ella, y que ambos/as haceís lo posible porque esa amistad se fortalezca y sirva para que crezcaís, no sabreís cuanto habremos ganado en la vida.
Mis experiencias en la vida han surgido de los propios errores. Ellos han hecho que yo pueda considerar y reconsiderar la vida dentro de un marco difícil donde la competitividad insana y la ambición sin límites puedan destruir una relación.
Creo siempre (o casi siempre) comportarme de una manera leal y honesta con mis padres, con mi familia, con mis amigos y amigas, con mis compañeros/as de trabajo, y ello ha posibilitado que la vida, me regale, y no me robe, que me sonría y que no entristezca, y que ante todo, me mire agradecida, y no descontenta.
Cada vez que te acuestes, sé honesto/a contigo/a mismo/a, y considera que el mayor regalo en la vida es que estás vivo/a, y que puedes compartir la vida con quiénes mas deseas, y ante todo, que puedas dormir con la conciencia tranquila.
Feliz Lunes, y feliz vida.
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