No he querido dirigirme antes por decencia, y porque creía que usted era el último tonto de la lista. Pero sinceramente me representa muy a mi pesar. Me representa sin mi voto, pero sí con cierta empatia que tuve en el pasado con usted. Ya no. Ya sé que no cumple. Y si piensa en la dimisión, lo mejor que podría hacer, es llevarla a cabo. Pero claro, tampoco queremos un Podemos como responsable de nuestro país. Ni un portavoz. No queremos cuatro pelanas y perroflautas pidiendo utopias en un país tan demagogo como populista.
Nos gusta el morbo y el espectáculo, y por eso se encuentra usted donde se encuentra. Sus caras en el hemiciclo son lo mas. Pero no es mas que cara, que ni voz ni voto en un país, que como supondrá, quiere respuestas. Y respuestas inminentes.
Si hubiera cogido el toro por los cuernos, en su dia, nosotros le habríamos otorgado una pizca de confianza de la que carece totalmente en mi propia actualidad. No se puede caer a todo el Mundo bien. Ni espero sus respuestas, pero las soluciones mediocres y sinsentido que da, no nos sirven ni para limpiarnos el culo.
Ya no. Ahora lo único que quiero es que sea consecuente con lo que dijo un día antes del 20-N del 11, para además llevarlo a cabo, tomar el timón de un país que con dirigentes como usted, se va al garete. Ni quiero hablar de Podemos, pero es que no me deja elección. Y no es que el Iglesias sea santo de mi devoción, ni muchísimo menos, pero podría aprender un poco de esas palabras de consuelo y esperanza que sostiene y deja sobre la mesa. Por lo menos, algo bueno. Algo, por lo menos.
Pero tampoco quiero que se me olvide el último pulsito del señor Mas en el que usted quedó en muy mal lugar, y su prestigio se quedó a la altura del petróleo existente en aguas canarias. ¡Qué esa es otra! Y no podemos llamar accidentes, señor Soria, a acosos y derribos hacia Greenpeace.
No manipulemos la realidad, que a usted también se le da de lujo. Porque entre catalanes extremistas, canarios cansados por su propio apartheid y coletas sin fronteras, no da para basto. Y no hablemos de los bolsillos de oro, porque entonces le dejo en cama lo que queda de legislatura. Legislatura caduca que usted quiere reflotar con mentiras y/ó falsas verdades. Usted verá. Mi voto no lo tiene, ni lo tendrá. No creo en discursos de oro, y hechos de bisuteria.
Rajoy le han meado en el ojo, y lo siguen haciendo. Tiene miedo a un medio pelo, a un altanero con afan de Presidente, y a un cuerpo policial, mas mafioso que exitoso. Porque las cosas se pueden hacer de otra manera. ¿Qué imágen damos en Europa?. Esa no es la imágen que quiero dar. Esa no. Es duro decirlo, pero a veces me avergüenza tener los representantes políticos que tengo. Del pais no. Ejemplo de sociedad ante todo. De eso debe sentirse orgulloso. Ni ingleses, ni griegos, ni franceses, han estado a la altura de su propia decencia como los españoles. Por lo menos, dignos hasta la muerte.
Pero no voy a gastar mas saliva, o en este caso, clicks en el teclado para decirle lo que piensa la mayoria de españoles. Y, ojo, no quiero su puesto ni regalado. Vaya responsabilidad con la que está cayendo. Si pitufo sigue siendo, pero por lo menos que no se note el azul de sus ideas. Y nunca mejor dicho. El azul del Partido Popular se tiñe de negro con toda la herencia corrupta que va dejando en un rio cada vez mas oscuro.
Y no quiero que me pague un vuelo a Madrid. No utilizo aviones para mi disfrute personal con el dinero del Estado. Otros sí. Pero esa ya es otra historia que deberá ser madurada para ser destacada en un post del blog.
Así que, señor Rajoy, apure sus últimos cartuchos en el Gobierno, que por lo que leo y veo, el pelanas viene pisando fuerte, y que Dios nos pille confesados.
Feliz noche no Presidente.
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